Mientras lavaba los platos tuve una revelación, me di cuenta de que ya no tengo miedo de crecer ni de tener responsabilidades, por el contrario, tengo ganas de terminar el secundario, tener mis títulos, empezar y terminar los cursos que quiero hacer para después continuar con los estudios universitarios y quizás trabajar, tener mi propia plata y ser independiente. Es raro, por primera vez me siento capaz, eso me hace sentir bien conmigo misma, estoy progresando.